El Espíritu de la verdad, que procede del Padre, Él dará testimonio de mí

El Espíritu Santo es el don más precioso que nos ha dado nuestro Señor Jesús. Si podemos hablar de algún testamento de Jesucristo, la herencia que nos ha dejado nuestro Señor, es precisamente el Espíritu Santo.

Este don hermoso nos muestra la verdad de la vida que consiste en el amor de Dios. Todo lo que ocurre en nuestra existencia es fruto del amor. Dios da sentido y propósito a nuestra vida mediante su Espíritu paráclito que nos defiende de los ataques del mundo, la carne y el demonio que buscan meternos en un sin sentido y en la tristeza profunda.

El Espíritu es vida. Necesitamos defender la presencia de nuestro Señor mediante su Espíritu todos los días. Pedir este don es suficiente para enfrentar y soportar los avatares que se nos presente hoy y siempre. ¡Ven Espíritu e inunda nuestra mente del amor de Dios!

Leer:

Texto del Evangelio (Jn 15,26—16,4): En aquel tiempo, Jesús habló así a sus discípulos: «Cuando venga el Paráclito, que yo os enviaré desde el Padre, el Espíritu de la verdad, que procede del Padre, Él dará testimonio de mí. Pero también vosotros daréis testimonio, porque estáis conmigo desde el principio. Os he dicho esto para que no os escandalicéis. Os expulsarán de las sinagogas. E incluso llegará la hora en que todo el que os mate piense que da culto a Dios. Y esto lo harán porque no han conocido ni al Padre ni a mí. Os he dicho esto para que, cuando llegue la hora, os acordéis de que ya os lo había dicho».

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>