Archivo por meses: marzo 2019

¿Cuál es el primero de todos los mandamientos?

El amor es la base que sostiene el universo. Dios lo ha hecho todo por amor. Nos ha creado para que podamos ser amados por Él y que eso nos realice tanto que podamos luego amar en la misma dimensión.

El camino de la felicidad es seguir los pasos del amor. La clave es amar a Dios por encima del dinero, los bienes materiales, la fama, los afectos, los egoísmos y soberbias. La vía que conduce a la vida eterna es la de amar en la dimensión de la Cruz. Amar a los demás como Dios nos ama.

¡Ánimo! En este viernes de cuaresma renunciemos a las cosas que nos impiden llegar al amor.

Leer:

Texto del Evangelio (Mc 12,28b-34): En aquel tiempo, uno de los maestros de la Ley se acercó a Jesús y le hizo esta pregunta: «¿Cuál es el primero de todos los mandamientos?». Jesús le contestó: «El primero es: ‘Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es el único Señor, y amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas’. El segundo es: ‘Amarás a tu prójimo como a ti mismo’. No existe otro mandamiento mayor que éstos».

Le dijo el escriba: «Muy bien, Maestro; tienes razón al decir que Él es único y que no hay otro fuera de Él, y amarle con todo el corazón, con toda la inteligencia y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a si mismo vale más que todos los holocaustos y sacrificios». Y Jesús, viendo que le había contestado con sensatez, le dijo: «No estás lejos del Reino de Dios». Y nadie más se atrevía ya a hacerle preguntas.

Si por el dedo de Dios expulso yo los demonios, es que ha llegado a vosotros el Reino de Dios

¡Ánimo! Jesucristo puede liberarnos de todas las esclavitudes, debilidades y enfermedades. El tiene el poder de expulsar demonios y restaurar el nosotros la presencia divina. ¿Lo dudas?

Muchas veces nos sentimos tristes, solos o deprimidos. En nuestro día a día solo alcanzamos a ver oscuridad. Pensamos que nada ni nadie puede ayudarnos a tener mejor vida. Nos falta esperanza.

La buena noticia es que nuestro Señor nos puede liberar. Él quiere que seamos felices. Desea que nuestra vida esté colmada de bendiciones. Eso hará la pascua del 2019 en nosotros. Abrir el cielo y darnos la oportunidad de acceder a una vida nueva. ¡Ánimo!

Leer:

Texto del Evangelio (Lc 11,14-23): En aquel tiempo, Jesús estaba expulsando un demonio que era mudo; sucedió que, cuando salió el demonio, rompió a hablar el mudo, y las gentes se admiraron. Pero algunos de ellos dijeron: «Por Beelzebul, Príncipe de los demonios, expulsa los demonios». Otros, para ponerle a prueba, le pedían una señal del cielo. Pero Él, conociendo sus pensamientos, les dijo: «Todo reino dividido contra sí mismo queda asolado, y casa contra casa, cae. Si, pues, también Satanás está dividido contra sí mismo, ¿cómo va a subsistir su reino?, porque decís que yo expulso los demonios por Beelzebul. Si yo expulso los demonios por Beelzebul, ¿por quién los expulsan vuestros hijos? Por eso, ellos serán vuestros jueces. Pero si por el dedo de Dios expulso yo los demonios, es que ha llegado a vosotros el Reino de Dios. Cuando uno fuerte y bien armado custodia su palacio, sus bienes están en seguro; pero si llega uno más fuerte que él y le vence, le quita las armas en las que estaba confiado y reparte sus despojos. El que no está conmigo, está contra mí, y el que no recoge conmigo, desparrama».

No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento

Toda la ley de Dios se resume en Jesucristo. El ama cumple la ley entera. Es lo que ha revelado nuestro Señor con su pasión, muerte y resurrección.

La ley no es un conjunto de normas morales. La ley del Señor es un camino que conduce a la vida eterna. La gracia de poder cumplirla nos viene como un don de parte de Jesús.

Hoy podemos reconocer que Jesús es la ley encarnada que nos demuestra que todo aquel que se apoya en Dios puede obtener de Él la felicidad plena que ha sido prometida. ¡Ánimo!

Leer:

Texto del Evangelio (Mt 5,17-19): En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «No penséis que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento. Sí, os lo aseguro: el cielo y la tierra pasarán antes que pase una i o una tilde de la Ley sin que todo suceda. Por tanto, el que traspase uno de estos mandamientos más pequeños y así lo enseñe a los hombres, será el más pequeño en el Reino de los Cielos; en cambio, el que los observe y los enseñe, ése será grande en el Reino de los Cielos».

Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo

La Virgen María es modelo de todo Cristiano. En este tiempo estamos invitados a seguirle e imitarle. Nos muestra el camino de la Fe. Nos enseña a obedecer a su hijo, a ser dócil a la voluntad de Dios y a no tener miedo a la historia que se nos presenta.

La Virgen si que Si. Nosotros también deberíamos decirle que Si todos los días al Señor. Ella es la madre del Salvador. Nosotros nos beneficiamos de su Si y así podemos experimentar el amor de Dios presente en toda nuestra vida.

Tengamos siempre la apertura de la Virgen María que recibe en su seno al salvador del mundo entero. ¡Ánimo!

Leer:

Texto del Evangelio (Lc 1,26-38): Al sexto mes fue enviado por Dios el ángel Gabriel a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María. Y entrando, le dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo». Ella se conturbó por estas palabras, y discurría qué significaría aquel saludo. El ángel le dijo: «No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios; vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. Él será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin».

María respondió al ángel: «¿Cómo será esto, puesto que no conozco varón?». El ángel le respondió: «El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y será llamado Hijo de Dios. Mira, también Isabel, tu pariente, ha concebido un hijo en su vejez, y este es ya el sexto mes de aquella que llamaban estéril, porque ninguna cosa es imposible para Dios». Dijo María: «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra». Y el ángel dejándola se fue.

Se os quitará el Reino de Dios para dárselo a un pueblo que rinda sus frutos

Dios nos llama a conversión. Permite que nos prediquen, nos corrijan, nos anuncien el reino de Dios. En otras palabras, have todo para que podamos entender que nuestra vida muchas veces no va bien.

Hoy, viernes de cuaresma, estamos llamados a un cambio radical. Con la ayuda de Dios, empuñando las armas de la oración, ayuno y limosna, podemos seguir el camino de la vida que nos ofrece Dios es Jesucristo.

¡Ánimo! La felicidad se realiza mediante la confianza total en Jesús. Nunca dudes de su amor.

Leer:

Texto del Evangelio (Mt 21,33-43.45-46): En aquel tiempo, Jesús dijo a los grandes sacerdotes y a los notables del pueblo: «Escuchad otra parábola. Era un propietario que plantó una viña, la rodeó de una cerca, cavó en ella un lagar y edificó una torre; la arrendó a unos labradores y se ausentó. Cuando llegó el tiempo de los frutos, envió sus siervos a los labradores para recibir sus frutos. Pero los labradores agarraron a los siervos, y a uno le golpearon, a otro le mataron, a otro le apedrearon. De nuevo envió otros siervos en mayor número que los primeros; pero los trataron de la misma manera. Finalmente les envió a su hijo, diciendo: ‘A mi hijo le respetarán’. Pero los labradores, al ver al hijo, se dijeron entre sí: ‘Este es el heredero. Vamos, matémosle y quedémonos con su herencia’. Y agarrándole, le echaron fuera de la viña y le mataron. Cuando venga, pues, el dueño de la viña, ¿qué hará con aquellos labradores?».

Dícenle: «A esos miserables les dará una muerte miserable y arrendará la viña a otros labradores, que le paguen los frutos a su tiempo». Y Jesús les dice: «¿No habéis leído nunca en las Escrituras: La piedra que los constructores desecharon, en piedra angular se ha convertido; fue el Señor quien hizo esto y es maravilloso a nuestros ojos? Por eso os digo: se os quitará el Reino de Dios para dárselo a un pueblo que rinda sus frutos».

Los sumos sacerdotes y los fariseos, al oír sus parábolas, comprendieron que estaba refiriéndose a ellos. Y trataban de detenerle, pero tuvieron miedo a la gente porque le tenían por profeta.

Tienen a Moisés y a los profetas; que les oigan

La vida terrenal es un espacio de tiempo en donde estamos llamados a poner nuestra seguridad solo en Dios. El Señor envía muchos mensajes de conversión mediante acontecimientos y profetas para que podamos cambiar de vida y desapegarnos de la idolatría del dinero y los bienes materiales.

El principal mensaje que se nos da es la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Podemos experimentar la victoria de Jesucristo sobre nuestras muertes. ¿Qué pasaría si ni siquiera en eso creemos?

Hoy es un buen día para evitar que nos pase como al rico enviado al infierno. Acotamos a Cristo en nuestro corazón y podamos su ayuda para que nuestro corazón esté puesto en Dios y su proyecto de salvación.

Leer:

Texto del Evangelio (Lc 16,19-31): En aquel tiempo, Jesús dijo a los fariseos: «Era un hombre rico que vestía de púrpura y lino, y celebraba todos los días espléndidas fiestas. Y un pobre, llamado Lázaro, que, echado junto a su portal, cubierto de llagas, deseaba hartarse de lo que caía de la mesa del rico pero hasta los perros venían y le lamían las llagas.

»Sucedió, pues, que murió el pobre y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham. Murió también el rico y fue sepultado. Estando en el Hades entre tormentos, levantó los ojos y vio a lo lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno. Y, gritando, dijo: ‘Padre Abraham, ten compasión de mí y envía a Lázaro a que moje en agua la punta de su dedo y refresque mi lengua, porque estoy atormentado en esta llama’. Pero Abraham le dijo: ‘Hijo, recuerda que recibiste tus bienes durante tu vida y Lázaro, al contrario, sus males; ahora, pues, él es aquí consolado y tú atormentado. Y además, entre nosotros y vosotros se interpone un gran abismo, de modo que los que quieran pasar de aquí a vosotros, no puedan; ni de ahí puedan pasar donde nosotros’.

»Replicó: ‘Con todo, te ruego, padre, que le envíes a la casa de mi padre, porque tengo cinco hermanos, para que les dé testimonio, y no vengan también ellos a este lugar de tormento’. Díjole Abraham: ‘Tienen a Moisés y a los profetas; que les oigan’. Él dijo: ‘No, padre Abraham; sino que si alguno de entre los muertos va donde ellos, se convertirán’. Le contestó: ‘Si no oyen a Moisés y a los profetas, tampoco se convencerán, aunque un muerto resucite’».

El que quiera llegar a ser grande entre vosotros, será vuestro servidor

En tiempos electorales se hace más importante el llamado al servicio que los hace Jesús. Las aspiraciones a puestos de poder siempre han existido en el corazón de los seres humanos en todos los tiempos. ¿Qué nos dice Jesús al respecto?

El Señor muestra con hechos lo que quiere de nosotros. Dice que para debemos buscar los últimos puesto para servir mejor. Que la vocación de poder implica sufrir para la salvación de todos. El mundo necesita de hombres y mujeres que den la vida por los demás.

El liderazgo no es para satisfacer proyectos o ambiciones personales. Jesús mostró con sus acciones que significa ocupar “el primer lugar”.

¡Ánimo! Aquellos que hemos sido llamados a puestos de Vida Pública debemos entender que somos simples servidores llamados a dar la vida por los demás.

Leer:

Texto del Evangelio (Mt 20,17-28): En aquel tiempo, cuando Jesús iba subiendo a Jerusalén, tomó aparte a los Doce, y les dijo por el camino: «Mirad que subimos a Jerusalén, y el Hijo del hombre será entregado a los sumos sacerdotes y escribas; le condenarán a muerte y le entregarán a los gentiles, para burlarse de Él, azotarle y crucificarle, y al tercer día resucitará».

Entonces se le acercó la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos, y se postró como para pedirle algo. Él le dijo: «¿Qué quieres?». Dícele ella: «Manda que estos dos hijos míos se sienten, uno a tu derecha y otro a tu izquierda, en tu Reino». Replicó Jesús: «No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber la copa que yo voy a beber?». Dícenle: «Sí, podemos». Díceles: «Mi copa, sí la beberéis; pero sentarse a mi derecha o mi izquierda no es cosa mía el concederlo, sino que es para quienes está preparado por mi Padre».

Al oír esto los otros diez, se indignaron contra los dos hermanos. Mas Jesús los llamó y dijo: «Sabéis que los jefes de las naciones las dominan como señores absolutos, y los grandes las oprimen con su poder. No ha de ser así entre vosotros, sino que el que quiera llegar a ser grande entre vosotros, será vuestro servidor, y el que quiera ser el primero entre vosotros, será vuestro esclavo; de la misma manera que el Hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y a dar su vida como rescate por muchos».

Despertado José del sueño, hizo como el Ángel del Señor le había mandado

José hacía lo que Dios le mandaba. Jodé es un hombre justo porque hacía siempre la voluntad de Dios. Es modelo de todo hombre justo. ¿Quieres ser feliz? Sigue los ejemplos de José.

En un mundo donde la figura “masculina” está entredicha por las diversas consignas ideológicas, celebrar a José es volver a la pureza del estado primitivo creado por Dios. Necesitamos modelos que nos inspiren y José es la imagen del hombre que frente a las dificultades y dudas siempre hace la voluntad de Dios. La fuerza le viene de la oración y de la comunión perfecta con el Señor.

Sigamos el ejemplo de José. Hombre santo que a pesar de sus debilidades fue siempre dócil a la palabra de Dios.

Leer:

Texto del Evangelio (Mt 1,16.18-21.24a): Jacob engendró a José, el esposo de María, de la que nació Jesús, llamado Cristo. La generación de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de empezar a estar juntos ellos, se encontró encinta por obra del Espíritu Santo. Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto.

Así lo tenía planeado, cuando el Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque Él salvará a su pueblo de sus pecados». Despertado José del sueño, hizo como el Ángel del Señor le había mandado.

Sed compasivos, como vuestro Padre es compasivo

El Amor es Dios. Es la esencia divina que se ha manifestado de manera extraordinaria en Jesucristo. Dios muestra su amor perdonando a todos, incluyendo a los más malvados y pecadores. Sabemos que Dios es amor porque hemos sido perdonados por Él. ¿Por qué no dar ese mismo amor a los demás?

Una de las grandes debilidades que mostramos es cuando juzgamos a los demás. Nos la pasamos chismeando con todos y de todos. Es un impulso diario que parece que nadie logra vencer. Lo propio de las personas de este tiempo es hablar mal de los demás. ¡No así los cristianos!

Estamos llamados a mostrar el mismo amor y misericordia de Dios. Si somos cristianos debemos perdonar a todos. Siempre está en bendición. Es lo propio del cristiano, considerar a los otros como superiores. ¿Estás dispuesto? Ánimo, Dios nos dará la gracia.

Leer:

Texto del Evangelio (Lc 6,36-38): En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Sed compasivos, como vuestro Padre es compasivo. No juzguéis y no seréis juzgados, no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados. Dad y se os dará; una medida buena, apretada, remecida, rebosante pondrán en el halda de vuestros vestidos. Porque con la medida con que midáis se os medirá».

Vete primero a reconciliarte con tu hermano

El encuentro personal con Cristo hace que las personas se reconcilien. El Amor de Dios se hace práctico cuando los que están enemistados se perdonan y vuelven a tener comunión. En esto consiste el reino de los Cielos.

¿Tienes alguien con quien reconciliarte? ¿Necesitas algún problema con un hermano y hace tiempo que no le hablas? ¿Albergas algún tipo de resentimiento contra alguien? Antes de participar en las liturgias cristianas o hablar de Dios, ve y reconociste primero. Nada está por encima del amor Dios y al prójimo. Ama y luego puedes hacer lo que quieras. ¡Ánimo!

Leer:

Texto del Evangelio (Mt 5,20-26): En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Os digo que, si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el Reino de los cielos. Habéis oído que se dijo a los antepasados: ‘No matarás; y aquel que mate será reo ante el tribunal’. Pues yo os digo: Todo aquel que se encolerice contra su hermano, será reo ante el tribunal; pero el que llame a su hermano “imbécil”, será reo ante el Sanedrín; y el que le llame “renegado”, será reo de la gehenna de fuego.

»Si, pues, al presentar tu ofrenda en el altar te acuerdas entonces de que un hermano tuyo tiene algo contra ti, deja tu ofrenda allí, delante del altar, y vete primero a reconciliarte con tu hermano; luego vuelves y presentas tu ofrenda. Ponte enseguida a buenas con tu adversario mientras vas con él por el camino; no sea que tu adversario te entregue al juez y el juez al guardia, y te metan en la cárcel. Yo te aseguro: no saldrás de allí hasta que no hayas pagado el último céntimo».